Ela Moreno, autora de Cansada de sobrevivir, ahora me toca vivir.
Ela Moreno no es su nombre, pero esta sí es su historia. Su primer libro, Cansada de sobrevivir, ahora me toca vivir (Editorial Azafrán, 2024) repasa una historia familiar atravesada por la violencia, pero también por la resiliencia y la superación.
Este relato biográfico se teje con las vivencias de tres generaciones de mujeres que se enfrentan a la vida y a los obstáculos de su tiempo: el machismo, la violencia y las expectativas de la sociedad sobre lo que debían ser –y también soportar–. Ela revisa las tristezas de su infancia y juventud, marcada por una relación difícil con su padre y madre.
«Me hubiese gustado haber publicado este libro con mi nombre, pero no lo hago por mi hermano», cuenta. Sus dos hijos mayores conocen una parte de su historia, los más pequeños no. Su hermano tampoco. «Él tiene un papá y una mamá increíbles, que fueron todo lo contrario a lo que fueron conmigo. Si él es feliz, ¿para qué le voy a arruinar la vida? Con una que sufra es suficiente», dice.
Una vez que Ela conoció a quien actualmente es su marido ―y a quien dedica su libro―, comenzó su camino de sanación. «Al verme enfrentada a la relación que mi marido tenía con sus hijas, pude desbloquear recuerdos de mi propia infancia y adolescencia. Comprendí, gracias a la terapia con la psicóloga y el psiquiatra, que hubo cosas que viví que no estaban bien. Y pude ver, también, que habían dejado una huella profunda en mí», cuenta. «De la terapia guardo dos grandes aprendizajes: el primero es que si la mamá está bien, los hijos estarán bien; primero debo estar bien yo. Lo segundo, es que los hijos no estamos obligados a querer a nuestros padres. Eso fue muy liberador», agrega.
Este libro es parte de ese proceso de sanación, cuenta Ela. «No me da vergüenza contar mi historia, ya no lloro al contarla. Estoy completamente sanada. Sí pasó que, escribiendo este libro, se me vinieron muchos recuerdos y pienso que quizá este libro puede ayudar a otra mujer a sanar, que vea que sí se puede salir adelante. Uno de mis objetivos es motivar a que más mujeres hablen, a que las madres le crean a sus hijas cuando les cuentan cosas, que las apoyen», señala.
Entrevista por Carola Cares.